La región del noreste de Brasil, la más pobre del país, puede verse beneficiada por el crecimiento de las inversiones chinas en la región, en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, según apuntaron hoy expertos en un seminario organizado por la Federación de las Industrias del Estado de Pernambuco (Fiepe).

Titulado "Inversiones chinas en el noreste a lo largo de 50 años de relaciones diplomáticas con Brasil: perspectivas y desafíos", el seminario resaltó el avance que hubo en las inversiones chinas en el noreste de Brasil en los últimos años.

Para Múcio Aguiar, presidente de la Asociación Pernambucana de Prensa, mientras que Estados Unidos llega, muestra las armas y así domina el mundo, China se dedica a afianzar las relaciones comerciales.

En este sentido, el noreste de Brasil se está convirtiendo en un gran receptor de inversiones chinas. "Hemos visto ya significativamente algunas inversiones, entre las cuales lidera el estado de Bahía con la fábrica de la montadora BYD", comentó Aguiar.

Por su parte, el presidente del Instituto de Investigaciones Estratégicas en Relaciones Internacionales y Diplomacia (Iperid), Thales Castro, recordó que, entre 2005 y 2023, Brasil fue el cuarto destino mundial de inversiones chinas, con 76.000 millones de dólares repartidos en 95 proyectos.

Según Castro, tales inversiones chinas en Brasil están concentradas en el sureste desde 2010, con el 53 por ciento del total, seguido del noreste, con el 16 por ciento, y el centro-oeste, con el 10 por ciento.

Bahía, que recibió el 5,6 por ciento del total de las inversiones chinas entre 2007 y 2023, figura quinto en la lista de los estados brasileños que más inversiones chinas recibieron, frente a Sao Paulo, con un 36 por ciento, y Minas Gerais, con un 8,9 por ciento.

Sin embargo, el noreste de Brasil, formado por nueve estados, cuenta con todos los elementos necesarios para pasar a recibir más inversiones chinas en los próximos años, que pueden ser en infraestructura, energía renovable, minería, producción industrial, sector agropecuario, cooperación académico-cultural y comunicación, según Castro.

Como muestra de ello, China abrió en 2016 un consulado en Recife, en el estado de Pernambuco, para atender a toda la región del noreste.

Desde entonces, los proyectos chinos en la región no pararon de aumentar, como el puente que unirá la ciudad de Salvador con Itaperica, en la Bahía de Todos los Santos del estado de Bahía, y que requerirá unos 9.000 millones de reales (1.650 millones de dólares) en inversiones a cargo de China Railway 20th Bureau Group Corporation (CR20) y China Communications Construction Company (CCCC).

También en Bahía, destaca el anuncio de la fabricante de automóviles eléctricos BYD de construir su primera fábrica en América Latina, mientras que en Ceará, China puede beneficiarse de las energías renovables que ofrece la región, principalmente el hidrógeno verde, resaltó Castro.